Generalidades
Hace millones de años, existía el vacío eterno, la ausencia total de todo. Esta etapa fue conocida como ILLA, el origen de la energía. El primer germen de energía surgió, creando la chispa de fuego que originó la explosión atómica del universo, conocida como el Big Bang. Esta chispa se llamó ILLA TICSI.
La explosión dio lugar a la lluvia de fuego, los asteroides, conocida como WILKA NINA o fuego sagrado, la cual formó los sistemas solares y planetas en el cosmos Pachacamac. Con el paso de los millones de años, un meteorito que vagaba por el cosmos, se unió con otros, formando una enorme bola ardiente. Esta bola se enfrió, dando origen al planeta Tierra.
Con el cambio de temperatura, se generaron el aire, fuego, tierra y agua. Estos elementos se unieron en la MAMA QOCHA, o laguna madre, iniciando la creación de la vida. El choque cósmico entre estos elementos y las energías del Sol dio origen a la vida en este planeta, llamado Pachamama. Este fenómeno fue denominado WIRACOCHA, la unión que fertilizó la vida sobre la madre tierra.
¿Qué es la espiritualidad Inca?
En la espiritualidad Inca, se destaca el origen, el espacio, el cosmos y el tiempo. El planeta Tierra, en sus 800 millones de años, ha dado lugar a numerosos grupos humanos, desarrollándose en diversas culturas, incluyendo la Inca del Tawantinsuyo, en lo que hoy es América del Sur.
A través de la unión de culturas, se formó el sistema Inca, que posteriormente florecería como el Tawantinsuyo. En esa unión, la espiritualidad se centró en venerar al Sol como padre y a la Tierra como madre, representada por la Luna.
El dios central de esta espiritualidad fue Pachakamaq. "Pacha" significa espacio, tiempo y cosmos, mientras que "Kamaq" representa el logro, el inicio y el alcance de todo. Científicamente, se define como el alcance del tiempo para lograr la vida en la madre tierra, desde lo macro hasta lo micro.
Como nos indica la Cosmovisión inca Wiraqocha es el encuentro de la energía solar y la energía terrestre que germinó la vida sobre este planeta tierra.
También al sol se venera por lo que con sus rayos ultravioletas de vida nos sigue dando la vida a todos los seres vivientes del mundo ,por ello fue y es el símbolo sagrado de los Incas. Ya que, sin el Sol no podría existir la vida sobre nuestra Madre Tierra, pues el templo del Sol estaba tapizado con planchas de oro macizo porque el oro en la espiritualidad Inca representa al Sol, de igual modo la tierra es madre de todas nuestras madres.
El Sol y la Tierra crearon la vida a través de sus energías, y por ello se les venera en nuestros templos. La Tierra, representada por la Luna, se simbolizó en el templo Cullichi, donde Manco Cápac y Mama Ocllo vivieron.
El arco iris estaba tallado con piedras preciosas que simbolizaban la armonía de las energías como la luz solar y terrestre originando colores hermosos del Arco Iris, dando una muestra de una unidad de vida armónica originando los hermosos colores de la bandera inca del Tawantinsuyo.
La espiritualidad inca respetó profundamente la vida en la Tierra, enseñándonos que los seres humanos dependemos de las energías solar y terrestre. Veneramos al Sol como padre y a la Tierra como madre, respetando toda vida.En el pasado, los Incas ofrecieron hospitalidad incluso a sus enemigos, lo que muestra su rechazo a las armas de exterminio masivo. En sus templos, ubicados en lugares magnéticos, realizaron ofrendas con maíz, coca y figuras de oro y plata, sin necesidad de sacrificios humanos.
La madre Tierra se venera como Mama Wari, representada por una luna de plata o un ídolo de mujer con la Luna, símbolo de fertilidad. Ella genera el viento de vida, nos cuida en cada respiro y nos da fuerza. Se pide perdón por el daño causado y se reconoce su importancia. Las mujeres, tras los ritos espirituales, llevaban una luna de plata en el pecho, sujetada con un Tipa. Las solteras llevaban una luna sola, y las casadas una luna unida al Sol. Los hombres solteros usaban un Sol, mientras los casados portaban un Sol unido a la Luna. Esta práctica reflejaba el estado civil. En la espiritualidad Inca, las lagunas simbolizan a las mujeres, mientras que los cerros representan a los hombres, y esta simbología se muestra en los templos del Sol, la Luna y el Rayo.
El templo de Sacsayhuamán
Sacsayhuamán, según la cosmovisión Inca, representa la fuerza magnética o la energía vital de las montañas. En su idioma, su nombre significa "Satisfacer al dios Huamani", quien fertiliza la tierra para dar vida a los seres vivos. Por ello, construyeron el templo con tres líneas en zigzag: la serpiente (sabiduría), el puma (armonía cósmica) y el cóndor (fuerza cósmica). Estas representaciones enseñan que armonía, fuerza y sabiduría permiten expresar la belleza de nuestros actos. Con disciplina, cientos de hombres tallaron piedra por piedra para edificar Sacsayhuamán en beneficio de la humanidad.
El diseño del templo de Sacsayhuamán, en forma de zigzag, representa a Illapa, el rayo o relámpago. Esta arquitectura es una de las más perfectas en cuanto a resistencia sísmica, ya que las paredes se mueven en armonía durante los terremotos sin romperse. Además, su ubicación geográfica, entre montañas como Salkantay, Huanacauri y Pachatusan, se encuentra a una altitud de entre 3,000 y 4,000 m.s.n.m. Los templos incas funcionaban como centros de sabiduría, comparables a las universidades de hoy.
¿Cómo estaba dividido?
Sacsayhuamán se dividió en dos secciones: una funcionaba como universidad para los hijos del Sol y la Tierra. Dos sacerdotes, los Intiyayas, se encargaban de venerar las energías del Sol y la Luna. Kontihuísa dirigía la veneración del Sol y los espíritus de la luz, mientras que Huayllahuisa se ocupaba de la Luna y los astros. Estos sacerdotes recibían mensajes de las huacas solares y lunares y las protegían. Bajo su mando estaban los Willaqhumas, quienes también asesoraban al Inca, formado en la religiosidad solar y lunar. Esto explica las luchas entre dos hermanos por el poder.
En la religión del Inca, el fuego es sagrado porque ILLA TICSI originó la explosión atómica del universo, creando la formación de sistemas solares que más tarde unificaron sus energías con las energías de la Madre Tierra obligándonos a ser sus hijos inseparables de las energías Solar-Terrestre, por ello todos los seres vivientes de la tierra somos hermanos, el calor del Sol no solo es Cuando el Sol esta resplandeciente en el día, el calor del Sol es el mismo calor de nuestros cuerpos, que honor para nosotros los terrestres ser hijos del Sol y de la Pachamama.
CONTÁTENOS
Correo Electrónico: info@ayahuascaretreatcusco.com
Celular: (+51) 950 738 710
WhatsApp: (+51) 927 743 016
Dirección: Urb. Dolorespata S/N, Jr. Paititi